Un oportunista malintencionado, del Partido Popular, ha levantado la polémica en Vigo por el nombramiento de familiares de militantes y concejales del PSOE en el Ayuntamiento.
Se ha producido malestar incluso entre los propios socialistas, mal informados, recelosos de que la imagen de su partido, pueda verse dañada por aquello que se va diciendo por ahí.
Un personaje del Partido Popular, introduce la cizaña. Dice, sin responsabilidad alguna, centrado únicamente en soltar lastre sucio, que nombrar a ciertas personas próximas al PSOE en Vigo, es una injusticia cara a los ciudadanos.
Injusto, resulta que a personas que se permiten hacer el mal, desde un cargo otorgado por los votantes, en este caso de los votantes del Partido Popular, no se les pidan cuentas después de comprobar que han hecho un flaco favor al bienestar ciudadano.
Pena nos da, ver que no se da asentado la derecha en una democracia serena, en la que hace falta sumar y construir. El inconsciente personaje sólo ha tirado piedras contra el tejado del ordenamiento jurídico creado por y para el pueblo, hace una labor infecciosa que no beneficia a nadie, abre su boca ante la opinión pública, a través de los medios, de algunos desinformados en la materia y entre todos, sacan un ladrillo más en el derrumbe de lo que tanta falta nos hace, el orden básico para la convivencia.
El propio Partido Popular, al que pertenece el anunciador frustrado, debería salir al paso de tales manifestaciones, desautorizando su impertinente intromisión.
Es bueno recordar que el personal al servicio de los Ayuntamientos puede ser de índole diversa, de todos conocidos, existen funcionarios de carrera, entre los cuales hay que diferenciar los de habilitación nacional (Secretarios e Interventores-Tesoreros, ambos pasan por las fases de entrada y superior); los restantes funcionarios locales; el personal laboral, compuesto por fijos y temporales y, finalmente el personal eventual.
La polémica levantada en el Ayuntamiento de Vigo, por un irresponsable oportunista del Partido Popular, se refiere a personal EVENTUAL, este tipo de relación jurídica está compuesta por personas de CONFIANZA que pueden prestar puestos Directivos de Servicios, para lo que necesariamente habrán de ser funcionarios de cualquier Administración (local, autonómica, central, etcétera); también dentro de los eventuales (puestos de confianza) existen aquellos puestos propiamente denominados de CONFIANZA O ASESORAMIENTO ESPECIAL, a los que no se exige ninguna condición ni específica, ni especial para su nombramiento. Así se establece en la Ley.
En las plantillas municipales, habrán de existir una previsión de las normas estatales referente a ciertos puestos de trabajo, que podrán ser desempeñados indistintamente por funcionarios o personal eventual. Así, el Pleno del Ayuntamiento desde el comienzo del mandato, es conocedor y partícipe de este tipo de personal eventual y de sus clases; el nombramiento y el régimen retributivo deben publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia. El Alcalde-Presidente es quién nombra y cesa a estos eventuales, resultando que los de CONFIANZA O ASESORAMIENTO ESPECIAL, deberían cesar cuando deje el cargo quién les ha nombrado.
Nada ilegal parece desprenderse de la actitud del Alcalde de Vigo, al nombrar a personas de su confianza para el asesoramiento especial que estime oportuno. Siempre que haya cumplido con las prerrogativas, mínimas legales, descritas.
Lamentar una vez más, la conducta destructiva del individuo popular. Maneras poco democráticas, formas de hacer política recurriendo a la confusión que no pueden ser convalidadas por nadie.
Salvo mejor parecer. Baldomero Gómez
Se ha producido malestar incluso entre los propios socialistas, mal informados, recelosos de que la imagen de su partido, pueda verse dañada por aquello que se va diciendo por ahí.
Un personaje del Partido Popular, introduce la cizaña. Dice, sin responsabilidad alguna, centrado únicamente en soltar lastre sucio, que nombrar a ciertas personas próximas al PSOE en Vigo, es una injusticia cara a los ciudadanos.
Injusto, resulta que a personas que se permiten hacer el mal, desde un cargo otorgado por los votantes, en este caso de los votantes del Partido Popular, no se les pidan cuentas después de comprobar que han hecho un flaco favor al bienestar ciudadano.
Pena nos da, ver que no se da asentado la derecha en una democracia serena, en la que hace falta sumar y construir. El inconsciente personaje sólo ha tirado piedras contra el tejado del ordenamiento jurídico creado por y para el pueblo, hace una labor infecciosa que no beneficia a nadie, abre su boca ante la opinión pública, a través de los medios, de algunos desinformados en la materia y entre todos, sacan un ladrillo más en el derrumbe de lo que tanta falta nos hace, el orden básico para la convivencia.
El propio Partido Popular, al que pertenece el anunciador frustrado, debería salir al paso de tales manifestaciones, desautorizando su impertinente intromisión.
Es bueno recordar que el personal al servicio de los Ayuntamientos puede ser de índole diversa, de todos conocidos, existen funcionarios de carrera, entre los cuales hay que diferenciar los de habilitación nacional (Secretarios e Interventores-Tesoreros, ambos pasan por las fases de entrada y superior); los restantes funcionarios locales; el personal laboral, compuesto por fijos y temporales y, finalmente el personal eventual.
La polémica levantada en el Ayuntamiento de Vigo, por un irresponsable oportunista del Partido Popular, se refiere a personal EVENTUAL, este tipo de relación jurídica está compuesta por personas de CONFIANZA que pueden prestar puestos Directivos de Servicios, para lo que necesariamente habrán de ser funcionarios de cualquier Administración (local, autonómica, central, etcétera); también dentro de los eventuales (puestos de confianza) existen aquellos puestos propiamente denominados de CONFIANZA O ASESORAMIENTO ESPECIAL, a los que no se exige ninguna condición ni específica, ni especial para su nombramiento. Así se establece en la Ley.
En las plantillas municipales, habrán de existir una previsión de las normas estatales referente a ciertos puestos de trabajo, que podrán ser desempeñados indistintamente por funcionarios o personal eventual. Así, el Pleno del Ayuntamiento desde el comienzo del mandato, es conocedor y partícipe de este tipo de personal eventual y de sus clases; el nombramiento y el régimen retributivo deben publicarse en el Boletín Oficial de la Provincia. El Alcalde-Presidente es quién nombra y cesa a estos eventuales, resultando que los de CONFIANZA O ASESORAMIENTO ESPECIAL, deberían cesar cuando deje el cargo quién les ha nombrado.
Nada ilegal parece desprenderse de la actitud del Alcalde de Vigo, al nombrar a personas de su confianza para el asesoramiento especial que estime oportuno. Siempre que haya cumplido con las prerrogativas, mínimas legales, descritas.
Lamentar una vez más, la conducta destructiva del individuo popular. Maneras poco democráticas, formas de hacer política recurriendo a la confusión que no pueden ser convalidadas por nadie.
Salvo mejor parecer. Baldomero Gómez